Así lo afirma un nuevo informe publicado por AM Best bajo el título ‘Las aseguradoras aprovechan la innovación para incrementar su solidez financiera’.
La innovación que ha introducido la industria aseguradora a lo largo de los últimos años ha permitido a las compañías del sector incrementar su volumen de clientes, a la vez que poder desarrollar una selección de riesgos más completa y personalizada. Así lo afirma un nuevo informe publicado por AM Best bajo el título ‘Las aseguradoras aprovechan la innovación para incrementar su solidez financiera’ (‘Insurers Leverage Innovation for Financial Strength’ en su título original, en inglés).
Una de las conclusiones más destacadas del documento de análisis es que las compañías aseguradoras de No Vida que más han puesto en marcha iniciativas relacionadas con la innovación en los últimos años han generado una ventaja competitiva, principalmente, en forma de crecimiento de su rentabilidad financiera en relación con las que van por debajo en su curva de innovación.
De hecho, en cuanto a volumen de primas netas emitidas en los 5 últimos años, las empresas más innovadoras de No Vida experimentaron un crecimiento promedio del 11,9%, mientras que aquellas calificadas en los niveles medio y bajo de innovación, apenas tuvieron crecimientos en ese periodo del 9,1% y del 7,9% respectivamente.
Además, AM Best destaca que las aseguradoras con tasas de innovación más elevadas también cosecharon porcentajes de pérdidas y de volúmenes de gastos más bajos y resultados técnicos menos volátiles. De acuerdo al informe, la divergencia en las tasas de crecimiento de las primas se agudizó particularmente en 2020, ya que las empresas más innovadoras aprovecharon sus modelos operativos digitales para continuar con sus actividades comerciales con normalidad, mientras que las empresas menos innovadoras lucharon para intentar retener a los clientes existentes o, en el mejor de los casos, poder atraer nuevos clientes.
Uno de los mayores obstáculos para la innovación operativa y sus beneficios asociados sigue siendo la existencia de un panorama fragmentado en la tecnología de la información (TI) heredada, lo que aumenta los costes y limita los esfuerzos en relación a las políticas de innovación. Para capitalizar completamente las tecnologías emergentes y capturar eficiencias operativas, AM Best cree que las aseguradoras menos innovadoras deben invertir en estrategias que tengan como eje principal la innovación.
Como era de esperar, el Covid-19 aceleró varias iniciativas de automatización, especialmente las orientadas al cliente, como las reclamaciones. Además, el informe de AM Best destaca que las empresas que llevan más adelantada su transformación digital han tenido en 2020 y 2021 índices de gastos más bajos. Sin embargo, al mismo tiempo, el informe señala que es posible que las empresas innovadoras deban hacer una compensación entre índices de gastos más altos a corto plazo por índices combinados más bajos y más sostenibles a largo plazo.