El nuevo año 2022, que recientemente acaba de comenzar, lo ha hecho marcado nuevamente por la evolución de la pandemia de Covid 19, que…
El nuevo año 2022, que recientemente acaba de comenzar, lo ha hecho marcado nuevamente por la evolución de la pandemia de Covid 19, que en estos momentos genera un escenario de contagios al alza provocados por la nueva variante omicrom, circunstancia que también afecta al sector de la mediación de seguros y, por ende, al de los corredores y las corredurías, que pueden ver como parte de sus plantillas tiene que quedarse en casa, en el mejor de los casos tele trabajando.
Pero, dejando a un lado las consecuencias puramente socio-sanitarias que se desprenden de la situación por la que atraviesa la región en estos momentos, el segmento de la mediación integrado por corredores individuales y corredurías deberá tener en cuenta una serie de aspectos durante 2022 para seguir por el buen camino. Ente los puntos principales se encuentran:
- Formación: se trata de un aspecto muy importante a tener en cuenta por todos los corredores y corredurías. La capacitación y la de los profesionales que integran la agencia es un arma que permite diferenciarse y ofrecer un servicio de calidad al cliente; un cliente cada vez mucho más informado y que requiere de mayores atenciones. Un aspecto, el formativo, que siempre va de la mano del ámbito regulatorio y que, por lo tanto, los corredores tendrán que conocer perfectamente si no quieren llegar a verse desprotegidos en un entorno cada vez más hostil.
- Digitalización: el proceso de transformación digital en el que estamos inmersos es otro de los aspectos principales a tener en cuenta por los corredores durante 2022. Así, aumentar las capacidades digitales de las empresas de mediación será fundamental, por ejemplo, para aumentar la visibilidad de la entidad en un mercado cada vez más competitivo, en el que se dan cita clientes cada vez más exigentes. También en todo lo relacionado con la gestión de la empresa en sí, para conseguir ofrecer una imagen más acorde con los tiempos que corren; apuesta que suele trasladarse con éxito a la cuenta de resultados de la entidad. En definitiva, los corredores no deben ver la transformación digital como una opción sino más bien como una obligación.
- Nuevos nichos de mercado: Para los corredores será fundamental estar muy atentos a las nuevas oportunidades que puedan surgir en un mercado con tanta actividad como es el asegurador. De ser posible, nuevos nichos de mercado en los que el tipo de asesoramiento que puede ofrecer un corredor, sin duda, marque la diferencia. Por ejemplo, en todo lo relacionado con los aspectos medioambientales o ciberriesgos que tanta trascendencia tienen en la actualidad.
Pero, del mismo modo, los corredores también tendrán que estar muy pendientes de los segmentos de población más jóvenes, generaciones totalmente digitales y que van a abordar sus necesidades aseguradoras desde otro enfoque muy distinto a los tradicionales, pero siempre buscando el mejor precio y las mejores coberturas. Por lo que corredores y corredurías no deben descuidar a los nuevos consumidores de seguros y sus preferencias; no pueden dejar escapar este tipo de oportunidades.
- Gestión de la cartera: será, sin duda, fundamental gestionar la cartera de forma óptima, ya que no se augura un gran desarrollo en este segmento de la oferta. Así, disponer y utilizar correctamente todas las herramientas con las que cuenta un corredor será clave si no quiere ver la evolución de su negocio comprometida; terreno en el que la digitalización también tendrá peso y marcará la diferencia entre el fracaso y el éxito.
En referencia a la manera de gestionar la cartera, en el caso de corredores y corredurías, también se encuentra la gestión de la relación con las entidades aseguradoras, punto en que también tendrán que tener como objetivo mejorar el intercambio de información entre corredores y compañías.
- Relación con los clientes: el corredor debe tener siempre presente que objetivo final a la vez que central de todo su trabajo es el cliente. Por ello, aunque suene recurrente, el corredor tiene que colocar en el centro de todo siempre al cliente. En definitiva, es quien sustenta su negocio y quien lo puede hacer crecer o conducirlo a todo tipo de problemas que harán difícil su continuidad como empresa. De ahí, que la experiencia de cliente sea un aspecto fundamental a tener en cuenta por los corredores que aspiran a hacer crecer su negocio.
Asimismo, en el terreno de la oferta, los corredores tienen mucho que decir. Aquí encontramos relación con el punto referente a los nuevos nichos de mercado, en el que los corredores pueden, de la mano de las entidades aseguradoras, crear productos a medida para hacer frente a nuevos riesgos que afloran en el mercado asegurador; sin duda, una seña de distinción para el mediador y para el cliente que le confía la gestión de sus riesgos. Aquí, la digitalización (tecnología) puede ser el gran aliado de los corredores y corredurías para hacer sentir al cliente que es especial y único.
A modo de conclusión, los corredores y corredurías pueden aprovechar todas las oportunidades que el mercado presenta en estos momentos y subirse a la ola o verla pasar y observar que hacen sus competidores, pero esta última no parece la mejor opción.
Fuente: SegurosNews